SOLIDARIDAD Y APOYO MUTUO

"...advertimos a la clase patronal que ellos nos han colocado en la calle y en ese terreno estamos dispuestos a afrontar las consecuencias que de esta torpe actitud se derive, todo menos que nuestra actitud de trabajadores honrados y conscientes sea vilmente atropellada." (Comité de Huelga. Huelga General de Zaragoza, 1.934)

miércoles, 6 de enero de 2016

ESPERANDO A LOS REYES MAGOS.-

ESPERANDO  A  LOS  REYES  MAGOS.




     “Cuento de Navidad” escrito por el compañero ‘Kuervo’, del Sindicato de Oficios Varios (S.O.V.) de la C.N.T.-A.I.T. de Almería.        




    Hace mucho tiempo, según las leyendas de las sectas cristianas, tres magos descubren una estrella que según sus “conocimientos” les llevará hasta un poderoso recién nacido al que deben agasajar.
     Ahora “repiten” la tradición para agasajar a todos los niños del mundo “occidental “.
     Los críos escriben cartas con sus infantiles ilusiones y deseos y los RRMM “parten desde Oriente” prestos a cumplir esos deseos .Pero este año las cosas han cambiado mucho, las cosas son diferentes. Son las 8H del 6 de Enero y los críos se levantan corriendo para abrir sus regalos, la sorpresa es mayúscula para todos: es que este año no hay ningún regalo para nadie.
     Llantos, inmensas barraqueras se escuchan en todos los hogares  del “mundo civilizado”

     ¿Qué ha pasado?

     Para contestar esa pregunta debemos retroceder un poco en el tiempo y ver los sucesos acaecidos en el viaje de los RRMM.
     Estos habían partido en larga y cargada caravana hacia occidente pero los problemas no tardarán en aparecer.
     Para empezar, entre tifones, tsunamis y  “Fukushimas“ han de comenzar dando un rodeo a su ruta habitual pero como los RRMM son muy previsores  llevan  tiempo de sobra para rodear tanto desastre  y llegar a su destino.
     Tras atravesar esas zonas (los críos de allí no deben de escribir cartas…) llegan al medio oriente; allí se encuentran con un panorama mucho más cruel y siniestro por ser “obra del hombre“. Palestina, guerra no declarada pero no menos cruel, sangrienta y destructiva,  donde piedras y bombas son el panorama “cotidiano“ de los habitantes de la zona y Siria donde bombas destrozan a la población civil que ya no sabe a dónde ir, hacen que los RRMM decidan entrar  a Europa por el Sur y no por la ruta habitual (allí tampoco deben de escribirles cartas…)



     Prosiguen su camino esquivando fronteras, inventadas por gobiernos y Estados para dividirnos, separando pueblos, fomentando insolidaridades, inquinas y falsas rivalidades.
     Pese a todos estos contratiempos tenemos a nuestros RRMM en el reino Alauí, tan solo a unas decenas de km. de la “muy civilizada y desarrollada Europa”. Por no haberlos necesitado nunca carecen de los llamados “papeles”, esos que anhelan  millares de personas para entrar en la Quimera Europea. Esto les va a impedir embarcarse en un ferry que une dos continentes, tan cercanos y tan lejanos al mismo tiempo. Así que, ni cortos ni perezosos y en pos de cumplir su misión, contactan con las mafias locales, encargadas de los “cruceros en patera por el estrecho”. Estas mafias están de enhorabuena, además de los inmensos “cargamentos  humanos “ que suelen manejar, ahora se les presentan 3 primos cargados de bultos y con la cartera llena .Tras una intensa negociación consiguen acordar un elevadísimo precio para embarcar en unas endebles embarcaciones. La pega es que no llega el sitio para todos y  uno, el viejo de la barba blanca, debe quedarse en territorio marroquí (1). El viejo ayuda a cargar los fardos a sus compañeros, entre los gritos de los patrones de las cáscaras de nuez que los van a trasportar, terminan la operación en poco tiempo.
     Comienza la “travesía“, con un mar embravecido  y furioso las embarcaciones saltan sobre las olas y el agua comienza a entrar por la borda.
     No tarda en consumarse el desastre y la barcucha que transporta al anciano de la barba pelirroja zozobra; gritos, chapoteos y luego nada, silencio y la muerte (2).
     Todo esto escuchado por la distancia, el piloto de la otra barca ni tiene tiempo ni ganas de salvar a nadie, total ya han pagado su trayecto.
     Se intuye la costa, el rey Baltasar (el negro para los que no lo conozcan), a pesar de las desgracias, se siente afortunado por salvar la vida y, además, ”poder cumplir su misión “.
     Parece que por fin están a salvo cuando  empiezan a descargar y, sin esperarlo, unos potentes focos se encienden y se escucha “Alto a la Guardia Civil“. Varias decenas de individuos vestidos de verde se abalanzan sobre los estupefactos supervivientes de la odisea. Estos no intentan la fuga, no hay escapatoria posible y el cansancio es terrible, a pesar de eso algún golpe se escapa, reducir a los “peligrosos  inmigrantes ilegales“ es lo más importante en ese momento (3).
     Toda esta historia será reflejada en un par de escuetos titulares de periódico que dirán lo siguiente:

“Interceptada otra patera  en las costas de…”  y “El mar entrega los cuerpos de varios inmigrantes ilegales”

     Mientras, los críos lloran y no aciertan a entender que es lo que pasa…
     Historias como esta pasan todos los días en las costas del “paraíso capitalista de Europa“
     Millares de personas, acosados por las guerras y la pobreza,  acuden a la “llamada“, guiados por medios de desinformación que enseñan  “Marbellas “ y ocultan millones de parados y pobres, utilizados por políticos de turno como moneda de cambio y estafados y explotados por mafias sin escrúpulos.
     Si los RRMM existieran, estarían encarcelados en un CIE, muertos en Lampedusa  o atrapados en las concertinas de la frontera.

(1) El viejecito de la barba blanca fue detenido por la policía marroquí; al carecer de papeles lo dejaron, con centenares de subsaharianos sacados del Monte Gurugú, en las puertas del desierto. Nada se supo jamás de él.
(2) El pelirrojo fue enterrado en una fosa común en algún lugar de la costa Andaluza.
(3) Baltasar estaba retenido en un C.I.E. esperando su “repatriación”.


1 comentario:

  1. A los que le piden papeles son a los pobres, una cosa son los moros y otra los Árabes, para los ricos no hay fronteras.
    En la verdadera historia de ¡Egpaña! los reyes (también los de verdad) lo que siempre han hecho es robar los juguetes y los sueños a los niños ...y a los mayores.

    Salud!

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